Nos dirigimos, en primer lugar, a una localidad llamada Bueycito. Es una pequeña villa rústica bien conocida por nuestro amigo ya que allí mismo nació su madre.
Antiguamente fue cabeza de la localidad pero con posterioridad se trasladó a Buey Arriba.
Allí, en Bueycito, visitamos la casa natal de nuestros amigos, donde habita una señora de 114 años llamada Joaquina.
Tenía un altar sincrético y una foto del papa Juan Pablo II en la puerta.
Este es otro de los aspectos que llama la atención de la sociedad cubana, la libertad y desenfado con que vive la religiosidad. Las religiones cristiana y africana se entremezclan continuamente.
Joaquina nos explicó que la casa fue propiedad de la madre de nuestro amigo, cuyo progenitor poseía tierras, que tras la revolución fueron entregadas al estado, junto con las viviendas. La familia, comprometida con el proceso revolucionario, se trasladó a La Habana.
Tras esta visita fuimos a una pequeña escuela de primaria, donde mantuvimos una charla con la directora, profesores y alumnos. La escolarización es total en toda Cuba, no hay un rincón donde haya niños en el que no haya escuela. Esta fue, junto a la sanidad universal y gratuita la prioridad de la revolución.
En Oriente hay un plan estatal destinado a llevar a los lugares más inaccesibles los recursos fundamentales para la subsistencia; esto incluye escuela, medicina, servicios sociales, etc... Se llama Plan Turquino.
En un establecimiento compré un bocadillo de queso, fue la primare vez que probé el queso elaborado allí. Este fue mi desayuno junto con un vaso de guarapo.
Nos marchamos en dirección a Buey Arriba. La idea era visitar la Televisión Serrana y disfrutar de la naturaleza.
En el pueblo compramos unos libros; una colección de grandes obras de José Martí. Entramos a ver el ensayo de un grupo musical.
Con la música en el cuerpo seguimos ascendiendo hasta llegar al lugar donde tiene la sede la televisión serrana. Se encuentra situada en San Pablo de Yao, una comunidad dedicada al cultivo de café que pertenece a Buey Arriba. Nos explicaron que desde que se había legislado para que el café pueda venderse libremente, sin el previo control estatal, este se había encarecido. Por ello, mucha gente se dedica a cultivar su propio café. En Cuba hay una intensa lucha entre los productores y trabajadores por cuenta propia, que desean mayor flexibilidad comercial, esto es liberalizar el sector comercial y disminuir los controles estatales, y el estado, que vela por el control de los precios. En los últimos años se han disminuido los controles, pero el Estado sigue estableciendo las normas del mercado. Hay mercados estatales a los que los productores están obligados a proveer para la distribución de productos a precios asequibles, y luego se les permite un porcentaje de venta libre.
Es la televisión local y a ella llegan cada año estudiantes de periodismo y comunicación de diversos países, aquellos cuyas Universidades tienen suscrito convenio. Una de ellas es la Universidad de Sevilla.
Por ello, nada más entrar al pequeño local, nos encontramos con una simpática sorpresa: Una foto del Puente de Triana enmarcada y una bandera del Real Betis Balompié.
Por supuesto, nos hicimos una foto, pero debido a problemas de privacidad no la publico aquí.
La televisión está en plena Sierra Maestra, desde allí se ve en la lejanía la loma donde el Che estableció su puesto. Hay un río que baña la zona, y todo el camino está lleno de bohíos (casas de campesinos)
Caminamos hasta el río, buscando un lugar donde refrescarnos. Unos niños nos guiaron.
Tras el baño volvimos al pueblo a comer algo. Entramos en un paladar, y luego, degustamos uno de los batidos de la Casa del Batido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario