sábado, 29 de diciembre de 2012

Bayamo; una perla en el Granma.

Sabíamos de su existencia porque nuestros amigos son lugareños de esta hermosa ciudad, que es, además, municipio cabecera de la provincia Granma.

Llegamos al medio día, bajo un sol en plenitud. En oriente hace más calor que en en occidente, y a medida que avanzas hasta Guantánamo, en el otro extremo de la isla, aumenta la sensación de calor.

Nuestro plan era quedarnos un par de días o tres, como mucho. Fuimos a buscar a nuestros amigos a su centro de trabajo, la televisión local.

El objetivo era ver Bayamo, Manzanillo, y visitar varios pueblos de la Sierra Maestra, luego ir hacia Holguín y después a Santiago de Cuba. Todo ello en 5 días, máximo tiempo por el que alquilamos el vehículo.

Nos habían buscado un lugar de arrendamiento, una casa de dos plantas cuya parte superior tenía una habitación con dos camas y baño, y la planta baja otra similar. La familia vivía allí.

En cuanto al sistema de alquiler, debo añadir algo que había olvidado. Los precios incluyen una comisión que se lleva la persona que te busca el arrendamiento. Si esa persona es un amigo que no desea la comisión, al precio debe restárse la comisión, por lo que un arrendamiento de 25 CUC se queda en 20 y de 30 en 25.
Todo esto incluye una pequeña trampa, ya que a veces el arrendatario, si no aclaras los términos, puede cobrarte la comisión y no entregarla a tu amigo, si este ha dicho que no la quiere. Con los propietarios de negocios particulares hay que negociar, como en todas partes.

Nuestro primer día en Bayamo, o nuestra primera tarde, la empleamos en visitar a las amistades, y luego, dar un paseo por la ciudad, cuyo centro gira en torno a una plaza de piso empedrado, donde está la Catedral del Santísimo Salvador de Bayamo, que data de 1516. Es la Plaza de la Revolución de Bayamo.

 
 
 
Entramos en una taberna de aspecto colonial donde sirven especialidades de la isla y la cerveza de Bayamo. Todo se consume en moneda nacional, aunque también venden cerveza Cristal y Bucanero.
 
 
En el centro de la plaza hay un monumento dedicado a Carlos Manuel de Céspedes y otro a Perucho Figueredo, autor del himno nacional, La Bayamesa, cuya letra esta grabada en una placa sobre la piedra. Es la letra original.
 
También hay un cine.
 
 
 
Una de las principales arterias del centro de Bayamo es la Calle General García. En ella hay restaurantes, heladerías, pizzerías, tiendas de alimentación. Lo que se percibe de inmediato en Bayamo es una intensa vida comercial que se diferencia de La Habana en que está dirigida al consumo cubano. Todo se vende y se compra en pesos (moneda nacional).
 
 
El perímetro que rodea a Bayamo es agrario y ganadero. Por ello, hay muchos productos del campo que se producen allí mismo o en los alrededores. Entramos en un comercio de productos agropecuarios donde estuvimos ojeando los productos; encontramos mermelada, batidos, dulces, maiz para comer, todo ello elaborado en la zona.
 
 
Buscamos un lugar para comer algo, pero estaba todo lleno. Para poder encontrar sitio hay que ir temprano. Los comercios y los establecimientos cierran antes de las diez. Paseando por la hermosa calle, charlamos sobre las elecciones municipales, pues las asambleas para postular candidatos se estaban celebrando en ese mes de Septiembre.
 
Paramos en una pizzería donde servían pizza para llevar y cerveza o zumos (jugos). El queso en esa parte de la isla está muy bueno. Lo venden en puestos ambulantes en las calles y carreteras. Me pedí una pizza con jamón que estaba deliciosa, comimos sentados en un banco.