miércoles, 11 de enero de 2012

Antonio Maceo, el Titán de Bronce.

Paseando por el Malecón se divisa una plaza luminosa en cuyo centro hay una enorme estatua ecuestre. Al preguntar por ella alguien te contestará, es el monumento a Antonio Maceo.


Antonio Maceo fue uno de los libertadores de aquella 1ª Guerra de Cuba, conocido con el sobrenombre "El Titán de Bronce" ya que era mulato y aguerrido.
Su nombre era Antonio de la Caridad Maceo Grajales, nacido el 14 de Junio (curiosamente el mismo día que el Che Guevara) de 1945 en Santiago de Cuba.



Su padre, Marcos Maceo, era un militar venezolano afincado en Santiago de Cuba, mulato, e hijo de una santiaguera.
Su madre, Mariana Grajales Coello, también mulata, cuya familia había sufrido en el pasado la esclavitud, consagró su vida a la lucha anti imperialista, y transmitió a sus hijos estos principios. La familia no era rica, pero tenían propiedades, lo que permitió a Maceo y sus hermanos (eran trece en total) tener acceso a la educación.




En 1862 se hace cargo de la administración de las cosechas que la familia poseía en Santiago de Cuba, y es allí donde toma contacto con el movimiento revolucionario nacido en esta zona oriental de la isla.

Su carrera militar se inicia cuando en 1968 se une a los alzados junto a Céspedes en Majaguago (zona montañosa). Junto a sus hermanos José y Justo y su padre. Se destacó como militar por su gran capacidad estratégica y valentía, Fue designado teniente, capitán, comandante y teniente coronel.

Participó en acciones importantes como la toma de Mayarí ,e importantes combates como San Agustín de Aguarás, donde murió su padre, Santa Rita, La Redonda, Barigua, El Mijal, Pinalito, Ti Arriba, Barajagua y Nuevo Mundo en el año 1970.

Preparó junto a Máximo Gomez el ataque a Guantánamo y la toma de la región, y fue designado por el General Máximo Gomez como jefe de operaciones de Guantánamo.


Dentro del movimiento independentista surgieron contradicciones que contribuyeron a dificultar la situación; regionalismos e indisciplinas que se personifican en las sediciones militares de Lagunas de Varona y Santa Rita, a las cuales se opuso Maceo.

Maceo se opuso a la firma del Pacto del Zanjón que puso fin a la guerra, ya que en este no se contemplaba ni la abolición de la esclavitud ni la independencia.
Maceo no se acogió a la amnistía que el tratado proponía para los alzados.


Se reunió, junto a otros mambises (soldados independentistas), para discutir los extremos del tratado de paz con el Mariscal Arsenio Martinez Campos, y fruto de ésto se origina "La protesta de Baraguá", ya que se oponen todos a su firma.



Maceo intentará reiniciar hostilidades, pero el gobierno de la República de Cuba en Armas le encomienda labores distintas de las militares.

Maceo y Calixto García iniciarán en Nueva York conversaciones que dan lugar al inicio de un segundo conflicto, conocido como Guerra Chiquita (1879), que fracasa.
Antonio Maceo tuvo que enfrentarse a acusaciones falsas por parte de España y también a los prejuicios raciales de algunos.

Se marcha a Costa Rica donde se hace cargo de la organización militar hasta que es allí contactado por José Martí para el siguiente y triunfal alzamiento, el de 1895-98.


Murió en combate contra los españoles en 1896 en las cercanías de Punta Brava.